En este año ya van 75 ejecutados por decapitación y hay 51 personas más, esperando por su turno. El único pecado: estar en contra del régimen político vigente en Arabia Saudita. Y los medios en el Mundo no dicen nada.
Esra al-Ghamgam por manifestarse pacíficamente, y a esto nos referimos a que solo habló públicamente sobre la libertad de presos políticos, el trato hacia la mujer, en el 2015, fue encarcelada y sentenciada a morir decapitada.
Según el medio Press TV, la activista fue ejecutada por orden de un fiscal este domingo 19/08. En la misma información, se ve un video en el que el verdugo la acostaba en el piso, para luego proceder a cortarle la cabeza con una espada.
El periódico al-Quds al-Arabi informó que su detención se produjo por sus actividades antisistema, esto junto a su esposo. Ella solía participar de las protestas pacíficas, apoyando a la democracia.
A pesar de que se levantó la prohibición de que la mujeres manejaran y que el príncipe Mohammad bin Salman intenta verse como “campeón de la reforma social”, igual las policías en mayo arrestaron a activistas que habían apoyado que se levantara la prohibición.
Activistas siguen presos y las ejecuciones continúan, a pesar de protestas de grupos humanitarios, nadie al parecer puede hacer nada por ellos.
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