¿Por qué somos infieles?

Lo sé, suena terrible. Solo oír la palabra “infidelidad” provoca dolor de estómago y escalofríos para quienes lo hayan vivido, ya sea como víctima o ejecutora.

Quizá pienses que voy a justificar la infidelidad en esta nota, explicar que es algo inherente al ser humano, que se debe aprender a vivir con eso…, pues definitivamente NO. Mi objetivo es que descubras cuáles son los factores que están siempre presentes, desde el proceso previo, hasta la consumación de un engaño… Pero para eso primero tengo que aclarar algunas cosas, luego podrás sacar tus propias conclusiones sobre el tema; yo solo expondré lo que es evidente a mis ojos, lo que respaldo con algo de estudios básicos de psicología y la madre del conocimiento empírico: la experiencia.

Imagino que, al igual que yo, has estado de uno u otro lado de la moneda (sí, he sido engañada y también he sido infiel, soy una persona común y corriente como todas y aprendo de mis errores) y cuando eres tú la víctima surgen un montón de preguntas que llegan al unísono con una sensación de nauseas y una puntada en el pecho:

¿Por qué a mí?

¿Por qué lo hizo?

¿Realmente me amó o solo jugó conmigo todo el tiempo?

¿Es “la otra” mejor que yo?, ¿más bonita, más interesante?

¿Qué fue lo que hice mal…?

Si pones atención, todas las dudas son en realidad inseguridades, porque cuando eres víctima de una infidelidad tu cerebro intenta buscar una respuesta lógica e inmediata que lamentablemente no existe por la simple razón de que, a veces, el problema no es tuyo sino de tu pareja. Sin embargo, tiendes a culparte, a buscar tus posibles errores en la relación, (y esto es lo más doloroso) a “compararte” con la aparecida. Tu autoestima se ve enormemente perjudicada y eso te provoca dolor, inseguridad, sensación de vacío, rabia y frustración. Te autocriticas, estás vulnerable y sensible, con una necesidad afectiva obvia por el deseo innato de llenar aquel espacio que se vació de un golpe… Quizá eres de las que perdonan y dan lo mejor de sí para recuperar su relación, y déjame decirte que está bien, pero es necesario poder llegar al centro de lo que provocó aquella desagradable situación para poder entenderlo y perdonar realmente a la otra. Generalmente el problema es de la persona desleal, no obstante, revisemos qué puede hacer caer a tu pareja en los brazos de alguien más:

• Mostrarte siempre insegura y celosa sin razón aparente: La pareja es el reflejo que tienes de ti misma, debe ser una persona digna de amor, admiración y respeto. Si no sientes esas cosas por ti, la otra persona lo percibirá y se sentirá insegura también.
• Dejar a un lado los detalles: Son importantísimos, hacen que cada día de tu relación se sienta como si fuera uno de los primeros, como una cita.
• Tratar a tu chica como a una amiga más: Es muy importante que seas amiga de tu novia, pero no tienes que olvidar que es precisamente eso, tu novia.
• Relajarte demasiado: La confianza es crucial, que te vea sin maquillaje, que te vea comiendo en la cama, entre otras cosas, son actividades que realizamos con personas en las que confiamos, por lo que está bien, pero descuidar demasiado tu imagen o tu higiene nunca es bueno, por mucha confianza que haya.
• Dejar que el sexo se vuelva monótono: Cuando la fase del enamoramiento se disipa y has saciado tu tornado hormonal con esa persona, las revoluciones bajan, el sexo se vuelve más suave y por ende también más escaso (no pasa en todas las relaciones, pero en muchas sí). Se debe mantener la complicidad, los juegos, los roles, etc. ¡No dejes de innovar!

Hay muchos otros factores, pero creo que esos son los más recurrentes. De ninguna manera justifico una infidelidad, sin embargo, hay personas que descuidan a su pareja sin darse cuenta.

Ahora, si eres tú la que ha cometido una infidelidad, de seguro te identificaste con lo descrito más arriba y de seguro tu ex novia o la chica a la que le fuiste infiel realizó más de alguna de las actividades descritas. No es excusa para haberlo hecho, pero lo hiciste. ¿Por qué…?

Una persona que engaña lo hace por falta de autoestima (necesita reafirmar sus cualidades positivas y para ello no le basta solo la opinión y atención de su pareja) o porque su novia hace o deja de hacer ciertas cosas, como ya lo mencioné, no obstante, hay algunos motivos que no son del todo responsabilidad de quien engaña, sino de la otra parte:

• Daño físico o psicológico: los insultos, la falta de atención, las descalificaciones y comparaciones, los empujones y golpes; son claras manifestaciones de agresión. Te enojan y humillan, quien debería cuidarte y consolarte te hace daño.
• Constante falta de seriedad y compromiso con la relación: Ella niega estar saliendo contigo, no te presenta a todos sus amigos, coquetea con otras a escondidas o en tu presencia y guarda muchos secretos; entre otras conductas que denotan falta de madurez.
• Egoísmo: ella piensa que sus asuntos siempre son lo más urgente, que sus necesidades deben estar cubiertas por sobre todo lo demás, no le importa si estás enferma o cansada, si demanda que la visites debes hacerlo, si quieres ver una película de terror y ella una romántica, debes ver la romántica. Eso es muy agotador.

Admito haber sido víctima de una infidelidad cuando era muy joven, una persona me engañó y luego me dejó por otra (pensé que iba a morir, pero no lo hice, solo sufrí por meses). Por ese entonces yo tenía grandes problemas de autoestima y mi pareja era, a todas luces, inmadura y demandante… no iba a resultar de todos modos.

Por otro lado, hace años fui yo quien engañó. Le fui infiel a alguien que siempre me comparaba con sus exs, que prefería estar con sus amigas antes que conmigo, que no me dejaba salir sola porque no confiaba en mí… sé que no son excusas, pero esas conductas me llevaron a buscar refugio en alguien más… finalmente esa relación tampoco funcionó.

Alguien me dijo una vez que se aprende de los errores, es cierto, pero si realmente quieres a quien tienes a tu lado y ves que esa persona no está poniendo mucho de su parte por mantener bien la relación, DÍSELO. El silencio es como un cáncer, la falta de comunicación en la pareja es terrible. Hazle saber cómo te sientes y lo que quieres y dile que haga lo mismo contigo. Las relaciones son de dos personas, no de una sola.

Una infidelidad es como una mancha de tinta en las páginas de un libro; es imborrable y siempre que la veas recordarás lo sucedido, por ello, en mi opinión, una relación que tenga su historia manchada de esa forma es mejor terminarla, cerrar el libro y no abrirlo más; a menos que tengas la capacidad de perdonar y seguir adelante, pero vamos, somos mujeres; sabes lo difícil que es. Perdonamos, pero no siempre olvidamos y ese dolor se queda ahí con nosotras, en silencio, el mal recuerdo se queda grabado a fuego.

Todas somos diferentes, valiosas y dignas de respeto. Ese respeto que deseas para ti debes retribuírselo a tu pareja. Antes de hacer algo de lo que te puedas arrepentir, habla con tu chica. Antes de que tu relación se deteriore, sal un poco de la rutina, recuerda lo que hacían cuando se conocieron, hazle regalos sin motivo alguno, no dejes que tu preocupación por ella desaparezca ni la hagas sentir que ya no te importa.

Ahora, si eres de las personas que siente que al engañar a su pareja obtiene la satisfacción de un golpe de adrenalina, que como tu pareja ya no te hace sentir cosas, necesitas aventuras para aumentar tu ego… lo que en realidad necesitas es terapia psicológica y algo de madurez.

Es mi humilde opinión.