El lunes 18 de Septiembre el juez Waldemar Claudio de Carvalho, de un tribunal de Justicia Federal de Brasilia, autorizó estas prácticas a psicólogos (terapias de reversión sexual de pacientes), que estaban prohibidas en Brasil por el Consejo Federal de Psicología desde 1999.
Además de esto, el juez pide al consejo que interprete sus normas de modo que los psicólogos puedan “promover estudios o atención profesional de forma reservada, referentes a la (re) orientación sexual, garantizándoles la plena libertad científica acerca de la materia, sin ninguna censura o necesidad de permiso previo”.
Hace 30 años la homosexualidad se retiró de la lista de enfermedades por la Organización Mundial de la Salud, parece inaudito que un juez pretenda pasar por encima de un derecho humano como es la libre elección de parejas sexuales y de vida.
En respuesta, las redes sociales se llenaron de hashtags: #tratesusprejuicios #lahomofobiaesunaenfermedad. Por otro lado, hubo gente que se rió de esto, buscando desesperadamente medicamentos para curarse o pedir licencias para los trabajos por ser homosexuales.
El Consejo Federal de psicología reaccionó diciendo que es esto “es un retroceso inmenso”, tener que reafirmar que la homoexualidad NO ES UNA ENFERMEDAD ni menos una perversión. “La psicología no será instrumento de promoción del sufrimiento, la intolerancia y la exclusión”, afirmaron en un comunicado. Al mismo tiempo llamaron a todos los profesionales a manifestarse para condenar la decisión judicial.
Esto es horrible desde todo punto de vista, si tomamos en cuenta también que Brasil es uno de los países con la más alta tasa de asesinatos de homosexuales en el Mundo. Aceptar este tipo de medidas, significaría legitimar más aún esta triste realidad. Sólo el año pasado alrededor de 340 personas fueron muertas por motivaciones homofóbicas.
Es importante recalcar que esto y más, es producto del poderoso avance de la “Iglesia evangélica” quienes poseen entre sus filas hasta alcaldes electos, diputados y gente influyente para seguir dominando todo lo que sea contra su credo o las “buenas costumbres”, incluidas obras de arte, teatro y otras religiones.
Esperemos que todo esto se termine, que solo sea una pesadilla, que puedan llegar a alegar a instancias internacionales.
Por lo pronto, miles de brasileños lesbianas, homosexuales, trans, heteros que aman la libertad de todos, en distintas partes del país se levantaron a protestar frente a tribunales, la consigna: “fuera nazis”!
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